Tal día como hoy, en 1591, nacía en Córdoba Benito Daza de Valdés en el seno de una familia de plateros, una época en la que la situación económica en España destacaba por el elevado empobrecimiento de la población campesina y el poder que ostentaba la Iglesia, que impedía el avance y la evolución de la ciencia moderna. Sin embargo, aún era posible que surgiesen personalidades como este andaluz que se encumbró por su universal aportación a la Óptica, a la Optometría y a la Oftalmología y al gran legado que ha ofrecido a las profesiones sanitarias de la visión.
Fuente: bit.ly/dazavaldes
Gracias a su pasión por el estudio a través de métodos autodidactas y apoyándose en el estudio de otros tratados de la época, fue capaz de publicar su obra conocida como “El uso de anteojos”, considerado un trabajo pionero en la materia en esta época. En ella, mostraba la clasificación y construcción de las lentes de las gafas, cómo era posible determinar los “grados” de vista que le faltan a un paciente e, incluso, recomendaba el uso de cristales ahumados a modo de primitivas gafas de sol. Además, aconsejaba a los cirujanos de la época a operar las cataratas solo de un ojo y, posteriormente, esperar la evolución antes de hacer lo propio con el otro.
Sin duda alguna, Daza de Valdés creó una magnífica obra científica por ser el primer tratado de óptica fisiológica. En este sentido, a día de hoy, muchos de sus procedimientos siguen estando vigentes.
Desde el Colegio Oficial de Ópticos-Optometristas de Andalucía siempre hemos tenido presente la figura de este célebre cordobés. Por ello, en 2017 decidimos crear los Premios ‘Daza de Valdés’, un reconocimiento que tiene como objetivo poner en valor la labor científica, técnica, cultural, social o humanitaria que realizan personas, instituciones u organismos relacionados con la profesión de la Óptica y la Optometría y con la sociedad en general en temas pertenecientes a la salud visual dentro de la geografía andaluza.
Se cumplen ya 427 años desde que Daza de Valdés comenzaba a asentar las bases de lo que derivó en la profesión de la Óptica y la Optometría y que, gracias a los avances impulsados en este ámbito, nuestro colectivo se ha convertido en el guardián de la salud visual de la sociedad.
¡Felicidades!
